Disney Sports Football

¿Ratones jugando al fútbol? ¿Patos haciendo entradas a los pollos? ¿Zorros por el suelo acosados por bolas de fuego? La mayoría de las emisoras de TV se arruinarían en unos segundos si retransmitieran esta locura. Pero por supuesto, la Disney Sports Network no es una emisora normal, y estos ratones, perros, patos y comadrejas tampoco son normales. Disney Sports Football toma como punto de partida el fantástico sistema de ISS de Konami, cambia los jugadores reales por entrañables personajes animados de Disney, y, como resultado de esta combinación, surge uno de los juegos de fútbol más divertidos de Nintendo GameCube. Igual que las películas modernas de Disney, este juego tiene algo que ofrecer tanto a niños como a padres, y presenta tantos modos de juego, objetos coleccionables y extras que tus amigos no van a oírte decir ni "mú" durante mucho tiempo. En Disney Sports Football podrás seleccionar a uno de los ocho equipos que hay para elegir, cada uno de ellos capitaneado por uno de los personajes animados más famosos de nuestro amigo Walt. Los mandos no podían ser más acertados, incluso dan un paso más que los de ISS2 de Konami, con los pases y los tiros reservados a los Botones A y B, y los Botones R y X encargados de controlar la altura de tiros/pases y los cambios de jugadores. Muy intuitivos, y en gran parte responsables de la fluidez y de la emocionante velocidad de todos y cada uno de los partidos. La primera pareja de Dream Cups es la introducción perfecta al juego, con equipos como los SteamRollers, que te ponen a prueba hasta el límite moviéndose sonámbulos por el campo e intentando meter gol en una portería invisible cinco metros por encima del córner. Después está la tercera copa: los Imperials, lanzando bolas de energía por doquier y con delanteros estrella con tantas probabilidades de fallar como de protagonizar unos dibujos animados de la Warner Brothers. Este aumento gradual de dificultad hace que niños y adultos puedan disfrutar por igual de las maravillas de Disney Sports Football. Los niños pueden mantenerse ocupados perfeccionando sus pases y poniéndose las botas mágicas para lanzar al contrario contra el césped, o ir disparados hacia la portería como una bola de fuego. Los adultos pueden dejar a un lado la brujería y dedicarse a hacer acrobacias con el balón, esquivando al portero con un toque controlado por el Stick de Control, o colar el esférico en la red con el uso diestro del Botón R, tomando decisiones sobre la completa formación de los equipos y las opciones de cambio de jugadores. La animación es, como era de esperar, uno de los puntos más fuertes de este producto Disney. Es un placer para la vista, incluso en los momentos menos caóticos, y te hará alucinar cuando veas cómo un toque de magia lanza a unos pequeños ratoncitos por los aires desde el medio campo hasta la portería, o a unos monos portero desgarbados que caen de espaldas por el impulso del balón en su estómago. Las celebraciones de gol también son para morirse de risa: nuestra favorita es la de un arrogante capitán que nos enseña su certificado de haber hecho un "Buen trabajo". Si a esto le añadimos (¡sorpresa!) la gran opción de poder intercambiar botas con poderes con la versión del juego para Game Boy Advance, acabarás teniendo una celebración deportiva que hará babear a todos tus rivales. ¿Gooooooooool? Sin duda alguna.